Trucks

La fuerza de la Patagonia

Servicios Petroleros Mirasal S.A. es un ejemplo de visión, adaptabilidad y éxito. Visitamos a su presidente en Allen, Provincia de Río Negro y descubrimos cómo la participación de los camiones Volvo potencian la labor de una pujante empresa.
Adaptabilidad, confianza y respuesta, así define Guillermo Rotondo los beneficios que Volvo Trucks le aporta a Mirasal. La posibilidad de llegar donde otros no pueden.
Las tareas en los puestos petroleros son de alto rendimiento y precisan de camiones confiables para llevarlas a cabo, por eso la empresa está sumando más unidades Volvo a su flota.

Allen es la sexta ciudad más poblada de la provincia de Río Negro. Durante años fue reconocida como centro productor de peras y manzanas. Pero desde hace unos años todo cambió para esta región, la extracción de hidrocarburos cambió la matriz productiva de la zona y hoy conviven las plantaciones frutales con pozos de gas y petróleo en constante funcionamiento.
“Yo no tenía idea de dónde quedaba Allen. Hace siete años yo era un porteño que, de a poco, se enamoró de la actividad y del lugar, aprendí sobre la marcha y sobre la necesidad de mejorar las relaciones con los clientes” nos cuenta Guillermo Rotondo, Presidente de Mirasal S.A. Hoy la empresa presta servicios integrales y colaterales a la industria del gas y el petróleo de la zona, que produce más del 40% de la producción de hidrocarburos de toda la provincia.
“Mirasal desarrolla una gran cantidad de actividades, no solamente transporte. Somos responsables de tareas integradas de gran precisión que requieren de mucha coordinación. Nada puede fallar”, cuenta Rotondo al explicar  la decisión de contar con camiones Volvo en su flota. “Poco a poco estamos cambiando todas las unidades por Volvo”, para ello, contar con un trato estrecho con Ruta Sur Trucks, el representante de Volvo en la zona ha sido un factor fundamental de decisión. ‘Sentís el apoyo, Volvo es parte de nuestro negocio’, comenta.
Treinta son los camiones Volvo que forman parte de una flota de más de 160 vehículos que incluyen maquinaria pesada, camionetas, hasta un autobomba y una estación de servicio móvil. La empresa cuenta con una gran variedad de modelos FH, FM, FMX y VM para diversas aplicaciones como tanques, volcadores, grúas hidráulicas, volquetes, todos ellos adaptados a las necesidades de la industria hidrocarburífera. Muchos de esos camiones están destinados a mantener operativos pozos de gas alejados de los caminos principales, en zonas de chacras o en áreas que hasta hace poco tiempo eran inaccesibles. La maniobrabilidad y la conducción precisa y efectiva de los camiones Volvo son determinantes para estas tareas. La innovación también es parte del ADN de Mirasal, es por ello que fueron los primeros en adquirir las primeras unidades FH con eje elevable, ideales para transportes con factor de carga del 50%.
Mirasal se encuentra construyendo su sede central en un predio de más de 8 hectáreas que incluirá talleres productivos, de mantenimiento, acopio de materiales, lavado de unidades y un centro de capacitación para brindar cursos de formación a sus empleados y conductores.
“Toda la iluminación perimetral y de seguridad se alimenta con energía solar; cuando esté todo listo, la circulación interna va a ser en bicicleta, no queremos desperdiciar una gota de combustible, además, el tratamiento de efluentes de los talleres será controlado para evitar la contaminación de las napas o del río”. Es aquí donde la elección de los camiones Volvo jugó un papel clave al momento de ampliar la flota de Mirasal. El empleo eficiente de combustible, los bajos costos operativos tuvieron un peso determinante, “Además de la protección del medio ambiente, es una cuestión de márgenes y eficiencia también. No queremos usar una gota de combustible de más; saber que contás con camiones tan eficientes como los Volvo hace que todo cierre”.


Un compromiso firme con la gente de la localidad.

“Antes que construir pozos, plantas o tender redes de caños, nosotros tuvimos que profesionalizar a nuestros trabajadores”. Guillermo muestra un entendible orgullo al contar que gran parte de sus 326 empleados hoy están ampliamente capacitados, la empresa asumió un compromiso con ellos y la comunidad. “Hemos hecho un esfuerzo y hoy son capaces de realizar tareas tecnificadas. Volvo nos ayudó a capacitar a los choferes para conducir estos camiones equipados con tecnología de vanguardia. Es un salto cualitativo inmenso”.
“Queremos trabajar cada vez mejor, ser más eficientes y lograr que se nos reconozca por ello, como una empresa que desde esta zona no para de crecer”. Siguiendo esa premisa,  Mirasal S.A. se ha transoformado en la primera empresa rionegrina en alcanzar la triple certificación IRAM e IQNet en Gestión Ambiental, Gestión de Calidad y Gestión de Seguridad.
La industria hidrocarburífera argentina avanza en la zona del Valle, la especialización, los procesos y certificaciones distinguen a las empresas que tienen éxito de las que se quedan en el camino. “Somos muy precisos en términos de procesos, las empresas nos demandan ese nivel de cumplimiento para otorgarnos los trabajos”, lo mismo sucede con el nivel de equipamiento, la capacitación del personal y las herramientas puestas a disposición de la producción de gas y petróleo. Las exigencias son altas y contar con la versatilidad, variantes y seguridad que ofrecen los camiones Volvo aportan valor agregado a las operaciones de la empresa.

‘Somos muy precisos en términos de procesos, las empresas nos demandan ese nivel de cumplimiento para otorgarnos los trabajos’.

Cruzar una ruta parece una tarea simple.

Hoy, en Mirasal, todos hablan del cruce de ruta. Pero no se trata simplemente de llegar de un lado al otro de la cinta asfáltica, están planificando el paso de un importante gasoducto por debajo de la Ruta Nacional Nº22. Es una tarea que sería imposible sin la presencia de los camiones Volvo de la empresa. Observar la operativa de la empresa es cautivante: un Volvo FM con dos grúas hidráulicas cargará varias toneladas de caños varias veces al día para dar forma al gasoducto, un Volvo FMX con caja volcadora acaba de llegar de uno de los pozos de la zona de chacras y ya sale para el cruce, su robustez y capacidad de carga van a ser primordiales para poder remover la mayor cantidad de material en el menor tiempo posible, logrando que la ruta no permanezca cortada ni un minuto más de lo indispensable. Además podrá utilizar caminos alternativos para llevar los materiales a la zona de descarga gracias a su control de tracción con activación automática. Es un ballet mecánico de absoluta precisión en el que Volvo tiene un papel protagónico.
 Guillermo saca su celular y habla con el representante de Ruta Sur Trucks. “Tenemos en marcha un pedido de varios modelos VM de diferentes configuraciones, entre ellos el VM 32 toneladas. Debemos responder a las necesidades de nuestros clientes antes de que lo requieran. Tenemos que estar un paso adelante siempre.” Mirasal no se detiene, junto a Volvo ya  tienen nuevos desafíos en el horizonte de la Patagonia. ■